domingo, 12 de mayo de 2013

JABÓN NEGRO DE MARRUECOS


Cuando vi en el blog de mi maestra jabonera (http://muchaespumita.blogspot.com.es/ ) una entrada dedicada a este jabón, me entró, al igual que a otros muchos (por los comentarios que leí) esa envidia sana de “yo lo quiero hacer”, que hasta que no me vi manos a la obra, no paré, y así fue como empezó mi aventura con el jabón negro de Marruecos.
 Una vez  decidido que lo quería hacer, me fui informando más sobre este “raro” jabón y el proceso que siguen en Marruecos para su elaboración.
Lo que mas me costó conseguir fueron las aceitunas negras, ya que por lo visto este año no había, pero finalmente, gracias a mi cuñada Angelines (que me las consiguió) me hice con ellas.
Como veis en la primera fotografía las aceitunas están arrugadas, pues las he tenido como un mes en sal gruesa para que echen toda el agua que puedan.  Después de este tiempo, las saque de la sal y las lave con abundante agua, para que quedaran limpias. Una vez lavadas, tuve que deshuesarlas a mano, una a una, pues no tengo ningún utensilio para hacerlo y la verdad que esa labor fue un poco pesada. Una vez deshuesadas las puse al horno, ya que todo esto fue en Febrero y no salía el sol por ningún sitio, aunque resultó ser   mas cómodo y  rápido.
Después de tenerlas bien secas las metí en aceite de oliva de primera calidad, en una proporción de 300 gramos de aceitunas por 1 litro de aceite de oliva.  Así han estado otro mes y medio, haciendo un Oleato de aceitunas en aceite de oliva, que cada vez que las agitaba, abría un poquito el bote, y me costaba resistir la tentación, con ese olor tan rico.

El proceso para hacer este jabón es bien sencillo, solo destacar que es en caliente, y no se utiliza sosa, sino potasa, pero es prácticamente igual. La única dificultad que encontré estaba relacionada con el sobreengrasado, pero consulté a Maribel y rápidamente me resolvió la duda, con esa generosidad que la caracteriza.
Así, aprovechando una tarde libre, puse un buen caldero  al fuego (eléctrico),  y allí estuve toda la tarde dando vueltas al jabón,  hasta que conseguí una pasta gelatinosa y  muy espesita, que además olía maravillosamente. La primera sorpresa fue que, nada mas terminar de hacerlo daba un ph de 6 y aunque no me atreví a usarlo tan pronto, a los tres día me di un autentico Hamman y realmente el esfuerzo como dice la canción  “valió la pena”.

Los ingredientes como el autentico jabón negro de Marruecos son: Aceitunas negras, Aceite de Oliva de primera presión en frío y Aceite de Argan. La piel,  gracias a estos aceites se queda totalmente hidratada y limpia, pues una vez que te quitas todo el jabón, empieza el proceso de masaje por todo el cuerpo, y de ahí que te quedes sin piel muerta y absolutamente suave.